Las que yo he hecho hoy son redonditas pero esta masa es perfecta para utilizar cortapastas.
Ingredientes:
- 250 g. mantequilla a temperatura ambiente
- 150 g. azúcar blanquilla
- 350 g. harina de trigo
- 1 cucharada esencia de vainilla
- Un poco de canela en polvo
- Un poco de azúcar para espolvorear
En un bol ponemos la mantequilla a
temperatura ambiente y añadimos el azúcar y la canela. Mezclamos bien hasta que
sea una crema espesa. Añadimos la esencia de vainilla y batimos hasta
incorporarla.
Echamos la harina y con la ayuda de una
cuchara y luego las manos, comenzamos a revolver hasta integrarla con la
mantequilla.
Envolvemos la masa en un papel film y guardamos
en la nevera 1 o 2 horas hasta que veamos que la masa está dura.
Retiramos la masa de la nevera, retiramos
el papel film y con un cuchillo vamos cortando trozos de masa para hacer
bolitas del mismo tamaño. Las bolitas las colocaremos dejando espacio en una bandeja de horno
con papel para hornear.
Mientras el horno se calienta a 180º guardamos
las bolitas en la nevera para que vuelvan a endurecerse. Es muy importante para
evitar que las galletas se deformen demasiado en el horneado. Horneamos durante
unos diez min. Sin dejar que se doren demasiado. Retiramos del horno y dejamos
que se enfríen sobre la bandeja.
Una vez frías podremos decorarlas con lo
que deseemos, azúcar, chocolate….
Espero que os gusten.
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